
Veinte años atrás Woody Allen estrenaba una de sus películas más perturbadoras: Maridos y mujeres, nominada al mejor guión en los Oscar y en los BAFTA. Ayer pudimos ver en el Rosalía de la mano de Teatro de la Abadía esta (no sé cómo llamarla) ¿dramedia?, en la que nos adentramos en el universo de una pareja que empieza a plantearse si su matrimonio va realmente bien cuando sus mejores amigos (de puertas afuera la pareja perfecta) les anuncian que han decidido separarse.
El director y encargado de la adaptación del texto, Álex Rigola, apuesta por romper barreras e integrar al espectador en el espacio escénico, colocando a los actores en tres sofás que están prácticamente en el proscenio y situando parte de la acción en el patio de butacas, de modo que algunos de los personajes interactúan en varias ocasiones con el público. Un público que ríe bastante a lo largo de la representación, unas veces a carcajadas, y otras veces con una risilla nerviosa al verse reflejado en alguna de las torpezas que comenten los protagonistas.
Todo el elenco está bien, pero me gustó especialmente Luis Bermejo, que encarna a Álex, el profesor de literatura al que daba vida Woody Allen en la versión cinematográfica. Bermejo consigue construir su personaje al margen de los tics del conocido actor y director. Miranda Gas, que se desdobla en dos mujeres antagónicas (Rain y Gloria), canta, toca la guitarra, y asume algunos de los momentos más «engorrosos» con el público ha sido todo un descubrimiento para mí. Los Maridos y mujeres estarán de nuevo en el Teatro Rosalía de A Coruña esta tarde a las 20:30 y el sábado 25 a la misma hora en el Teatro Jovellanos de Gijón. ¡Buen fin de semana!
Yesterday I attended the representation of Husbands and Wives from Woody Allen by Teatro de la Abadía. It was at Rosalía Theatre in A Coruña. Today at 20:30 there is a new representation.


